sábado, 10 de novembro de 2012

Como ser feliz no trabalho



"Felicidade não é fazer o que cada um quer, mas antes querer o que cada um faz"
 Jean Paul Sartre

Para la Psicología Positiva, la felicidad es la experiencia frecuente y abundante de estados emocionales positivos por sobre los negativos. Una de las creencias más extendidas es que la felicidad es un resultado, es decir, un estado emocional que se produce cuando alcanzamos algo, ejecutamos un determinado comportamiento o cuando nos ocurre un acontecimiento positivo. Esto es cierto, pero lo que hasta ahora se desconocía es que existe una poderosa relación inversa: que la felicidad conduce a los buenos resultados. Uno de los grandes hallazgos de la Psicología Positiva ha sido descubrir que las personas más felices viven más, gozan de mejor salud, son más productivas, obtienen mejores resultados, disfrutan de mejores relaciones y son más generosas.
En esta línea, La profesora Silvia Damiano, experta en inteligencia emocional, neuroliderazgo y compromiso, recoge su libro Engage Me (Implícame), que las empresas con personas más comprometidas generan más ingresos, beneficios y rentabilidad por acción. Las personas más implicadas desempeñan su trabajo un 20% mejor y se reducen en un 87% las iniciativas de abandonar la compañía (fidelización, rendimiento). Las empresas con personas involucradas son un 43% más productivas. Este nivel de compromiso es lo que hoy en día se llama ENGAGEMENT.
Silvia Damiano dice que: el engagement es poner tu cabeza y tu corazón en lo que haces y amarlo. Las tres E (en inglés) de la Implicación son “Enjoyment” (Disfrute), “Emotional connection” (Conexión emocional), “Empowerment” (Responsabilidad). Damiano explica neuronalmente el concepto a partir de la noción de “flow” (fluidez).
En términos de Recursos Humanos, el engagement es un estado afectivo positivo, relativamente persistente de plenitud, que es caracterizado por la dedicación y la concentración en el trabajo. La dedicación se asocia al entusiasmo. La concentración se asocia a un sentimiento de que el tiempo pasa rápidamente. Este constructo tiene su origen en la psicología positiva y también se asocia a otro concepto muy cercano al engagement, el flow.
Mientras que el primero se refiere a un estado relativamente estable, experimentado con relación al trabajo en general, el flow indica tareas o aspectos concretos del trabajo y es más breve temporalmente. Se denomina flow a la experiencia óptima de disfrute de una tarea: la actividad que se desempeña es satisfactoria en sí misma y la persona permanece totalmente concentrada en ella hasta el punto de perder la noción temporal (fuente: www.blogcapitalhumano.com)

¿Cómo son los empleados ‘engaged‘?

Las organizaciones buscan y promueven la motivación, el compromiso y la lealtad de los empleados en el trabajo, sin embargo quieren ir aún más allá, y lograr una identificación muy grande con la empresa y su tarea, que los empleados se “enganchen” emocional y cognoscitivamente con sus compañeros de trabajo, sus jefes y sus tareas, esto es lo que se denomina employee engagement (Edelberg, 2011).
Según, Marisa Salanova, profesora titular de la Universitat Jaume I, se ha demostrado científicamente que los empleados ‘engaged‘ son:
  • Hombres y mujeres de muy diversas edades, en ocupaciones con altos recursos laborales (elevada autonomía, clima social positivo), y que experimentan más emociones positivas que negativas a lo largo de su carrera profesional.
  • Emprenden más iniciativas, tomando el control de sus vidas.
  • Saben generar feedback propio sobre su desempeño y crean sus propias ‘recompensas’.
  • Muchos de ellos han experimentado alguna vez la ‘llamada’ o vocación pasional por su trabajo.
  • Tienen valores y creencias que ajustan a la cultura de la organización.
  • Se entregan a su trabajo, pero no son ‘adictos al mismo’. Para los adictos al trabajo, su trabajo es una obsesión y se sienten culpables y ansiosos si no están trabajando. No disfrutan de lo que hacen sino que trabajan para reducir la ansiedad; además no tienen vida ‘extra-laboral’, mientras que los profesionales ‘engaged’ disfrutan también de su vida fuera del trabajo.
Lo más interesante de todo esto es que el engagement se ‘contagia’ entre los miembros del equipo, generando así un engagement colectivo en donde el entusiasmo, la dedicación al trabajo y las emociones colectivas positivas son sus detonantes principales; configurándose así las organizaciones con ‘engagement‘.

Organizaciones con ‘engagement

El reto de los que dirigen las organizaciones es enfrentarse a las circunstancias negativas del ambiente laboral como el agotamiento emocional de sus empleados, el despido interior, el estrés motivado por el “trabajo bajo presión”, etc. Aunque no resulta fácil esta tarea, se deben tomar algunas medidas para eliminar o minimizar los efectos de tales circunstancias negativas.
La profesora Marisa Salanova comentaba en una entrevista reciente, que en los estudios del Instituto de la Felicidad se ha constatado que incluso en una situación de crisis como la que atravesamos, la gente valora más los afectos que el dinero. Los trabajadores aprecian mantener el trabajo pero también los aspectos emocionales, como sentirse cuidado por la organización, el apoyo de los compañeros o el desarrollo de carrera.
En el trabajo, hay demandas y recursos. Las demandas son aquellos aspectos que te exigen, como la presión temporal o la ambigüedad de rol, que provocan burnout o desgaste. En la otra parte, tenemos los recursos, que fomentan la motivación y el engagement. La perspectiva de la psicología positiva es focalizarse en incrementar y desarrollar estos los recursos.
Las organizaciones pueden potenciar el engagement a través de sus procesos de Recursos Humanos. El proceso de selección de personal es un buen momento para establecer las bases de los valores corporativos respecto al bienestar psicosocial. También en los procesos de evaluación y/o mediante el (re/)diseño del trabajo se incrementan los recursos disponibles y los niveles deseados de engagement.
Muchos profesionales desmotivados estaban ‘engaged‘ al principio de su carrera laboral, pero el incumplimiento de promesas organizacionales y la violación del contrato psicológico les llevaron a ‘quemarse’ poco a poco; básicamente por la inexistencia de esos recursos valorados y esperados por la persona… La rotación de puestos, la recolocación, o los cambios temporales de trabajo potencian el engagement cuando son percibidos como ‘nuevos retos’. Finalmente, el liderazgo y el aprendizaje están fuertemente vinculados al engagement del equipo de trabajo.
El elemento central de una dirección de personas, y en suma, de la excelencia organizacional, es ‘cuidar’, y no ‘quemar’ a los profesionales, ya que éstos son el ‘corazón’ de la organización. Los buenos profesionales, las personas ‘positivas,’ son el capital humano de la organización, y por eso, parece lógico que la política de DP se centre en cuidar y desarrollar ese capital tanto como sea posible* (Marisa Salanova)

¿Y qué podemos hacer de forma personal para ser un poco más felices en el trabajo?

A continuación y para concluir, proponemos una serie de estrategias para incrementar la satisfacción laboral:
  • Pon todo de tu parte en el trabajo: sé creativo, deja volar tu imaginación y entrégate en cuerpo y alma.
  • ¡Diviértete!: La diversión es un estado de ánimo; para que las cosas sean divertidas, tienes que ponerte en acción. Formúlate continuamente la siguiente pregunta: ¿qué puedo hacer para que esto sea más divertido? Cuando la diversión fluye, también lo hace la energía, la inteligencia y la empresa. Procura que tu trabajo sea lo más variado posible; experimenta con nuevas formas de pensamiento, explora nuevas opciones y profundiza en todo lo que de bueno hay en tu labor.
  • Disfruta del trabajo: cuanto mejor conoce cada cual lo que le gusta del trabajo, mejor suele desempeñarlo. Los estudios sobre el estrés también han demostrado que quienes tienen un sentido de la diversión en el trabajo bien desarrollado tienden a estar más sanos y a tener mas éxito que los que solo lo hacen por dinero.
  • Se entusiasta. El entusiasmo genera dedicación, impulso, originalidad y, por encima de todo, resultados.
  • Ten coraje: Sé elogioso, cortés y siéntete satisfecho de reconocer los éxitos de los demás.
  • Sé tu mismo: Todas las empresas, públicas o privadas, son básicamente empresas humanas. Interésate y establece una sólida relación con la gente con la que trabajas y para la que trabajas.
  • Siéntete orgulloso de su trabajo: No importa lo pequeño o insignificante que parezca tu tarea. Todo trabajo merece ser valorado, y el tuyo igual que el de los demás.
Información recopilada por @Isabelsoriar para el blog de Inspiring Benefits

Sem comentários: